Liberación de la Libertad (XLIX)

Paco Corraliza

PACO CORRALIZA:

 

Antes de seguir con Kant y su demoledor pensamiento nos detenemos a reflexionar sobre el pensamiento (la filosofía es el pensamiento del pensamiento” (1) escribió el estadólatra Hegel).

 

Los seres humanos presentes salimos del pasado y caminamos hacia el futuro junto con el resto de lo existente; incluso cuando estamos dormidos (de hecho, más que «estar dormidos», «estamos durmiendo o somos durmientes»). Lo queramos o no.

 

El suelo del tiempo presente se va «deshaciendo» bajo nuestros pies y, en ese sentido, no podemos dejar de caminar sobre este mundo; continuamente en tránsito entre lo ya ocurrido (esa «nada» latiendo en la memoria) y lo pendiente de suceder (esa «nada» viviendo en la esperanza).

 

Para evitar el vértigo y la explosiva convulsión de un presente en el filo entre dos abismos aparentes, la Naturaleza nos ha dotado de la inteligente, apaciguadora y previsora «fe humana». «Fe humana» que distinguimos aquí de la “fe animal”(2) a que se refería la descomunal, humilde y sincera inteligencia del filósofo español Jorge Ruiz de Santayana.

 

Esa «fe humana» se desdobla en una «fe retrayente», dirigida hacia el pasado (que nos mueve a creer en lo sucedido en nuestra presencia y memorizado verdaderamente) y una «fe consecuente», proyectada hacia el futuro (que nos anima, con natural presciencia, a creer en lo previsto y esperado sinceramente). Veracidad y sinceridad no son lo mismo.

 

La normal confianza en la fe retrayente nos permite, con voluntad consciente, afirmar las verdades factuales (asumiendo hechos, incluso los azarosos) a que nos referíamos en un artículo anterior [«Verdades-mentiras»]. Es análogo a lo que debería hacer la Historiografía (y muy distinto de lo que han hecho, con el Poder y con la Historia, las soberbias ideologías).

 

Por su parte, no tanto la confianza como la imperiosa necesidad de la «fe consecuente», nos obliga a elaborar conjeturas (instintivamente y a velocidad de vértigo), que continuamente nos anticipan la cambiante situación de las cosas en nuestro acuciante entorno, y a cada instante del movedizo presente, para adaptarnos a ellas en nuestro avance y/o modificarlas si está a nuestro alcance.

 

[[La «automatización del movimiento» (y, con ella, la supuesta «libertad de» movimientos) se encuentra en el origen, desarrollo y perfeccionamiento de todos los sistemas nerviosos de los animales superiores; y de sus respectivos cerebros como centros de control y comando. Incluido el animal humano, ese animal tan «original». El catedrático de Neurociencia de la Universidad de Nueva York, el colombiano Rodolfo Llinás, en “El cerebro y el mito del yo” (3) (2001) nos lo dice con explícita claridad: “La naturaleza de la mente debe entenderse con base en su origen, en el proceso de su desarrollo, que emana del perenne mecanismo biológico de ensayo y error. […] La predicción […] constituye la verdadera entraña de la función cerebral […]. La predicción de eventos futuros (vital para moverse eficientemente), es, sin duda, la función cerebral fundamental y más común.[…] La capacidad de predicción es claramente vital, de ella depende la vida misma del organismo”(3). El proceso de centralización y control cerebral, exigió, a su vez, una función mental que permaneciera estable en el «presente continuo» del tiempo: es el «estado mental» o “estructura funcional útil”(3) que llamamos «sí-mismo», «sujeto» o «yo». Rodolfo Llinás (2001): En los albores de la evolución biológica encontramos ya este impulso [de reconocer el sentido de lo futuro], esta fuerza directriz, esta intencionalidad que desemboca en imágenes sensomotoras y, en última instancia, en la mente y en el «yo». […] Por mi parte, sospecho que, incluso en los niveles más primitivos de la evolución, la subjetividad es la esencia constitutiva del sistema nervioso.” (3)]](*)

 

La «fe retrayente», junto con el hábito racional instintivo, nos permite ir describiendo y comprendiendo los hechos del pasado; la «fe consecuente» nos permite, con aquél mismo hábito, ir prescribiendo comprensivamente el futuro próximo o inmediato. Y la natural razón instintiva nos permite (frente a la artificial razón especulativa), conjugando la fe retrayente con la fe consecuente, reconciliar sencillamente el abismo del ruidoso pasado con el abismo del porvenir silente.

 

Las conjeturas derivadas de la «fe consecuente», informadas sabia, natural y lealmente por la «fe retrayente», nos proporcionan comprensión previsora de las probables verdades factuales del porvenir inmediato y próximo: las «proto-verdades» naturales. Profetizan un futuro altamente probable, pendientes de que la Naturaleza, si continúa siendo leal a sí misma, como habitualmente es, las confirme (la futura «fe retrayente» podrá entonces afirmarlas y asumirlas). Es análogo a lo que debe hacer la Ciencia (y bien distinto de lo que hacen las soberbias ideologías).

 

Por otra parte, como existe una probabilidad, por exigua que sea, de que las conjeturas no sean confirmadas por la realidad, cualquier natural «proto-verdad» es también una «proto-falsedad» natural (una contrariedad o desacierto en nuestras previsiones).

 

Esa irrupción de lo imprevisible en el devenir natural es, justamente, la que introduce una tensión innovadora que, de hecho, ha permitido el despliegue de la evolución adaptativa de la energía/materia a su propio devenir: aceptando «humildemente» y superando, «sabia» y «pacientemente» sus «imperfecciones» (impredecibles discontinuidades o singularidades). Eso le ha permitido pasar, nada más y nada menos, que desde la oscura frialdad de lo inerte a la luz caliente de la vida inteligente, en un proceso triunfal (aunque ciego y egocéntrico) de auto ordenación organizativa.

 

El asombroso triunfo de lo cuasi-infinitamente improbable nos invita a pensar que era necesario todo un universo para la aparición de la vida inteligente en el minúsculo planeta Tierra. Y nos incita a afirmar, junto con Hannah Arendt en “Entre el pasado y el futuro” (4) (1954) que nuestra propia vida es un milagro: Nuestra existencia entera, después de todo, descansa sobre una cadena de milagros, por decirlo así: el nacimiento del planeta, el desarrollo de la vida orgánica en él, la evolución del hombre desde las especies animales…”.(4)  Pero, ese «hombre» genérico, recordemos, es una especie animal; o, al menos, una especie de animal.

 

La voluntad consciente sobrevenida a la vida inteligente alumbró en el mundo dos «milagros» más: la verdad en el terreno moral y la Libertad colectiva en el terreno político de lo público, en la Política. La verdad moral, presidiendo palabras, intenciones y actos propios ante los demás, abre el paso a la Libertad colectiva de todos que guíe acciones sinceras de compromiso común. Ambas se conjugan racionalmente en el hábitat interpersonal («Inter-esse») de lo político-moral (en situación de reconocimiento mutuo, decisiones compartidas y promesas comprometidas). En compañía, la singularidad que la soledad conoce ansía mostrarse; la verdad que la soledad afirma quiere confirmarse; la Libertad que la soledad desea busca realizarse; y las contrariedades e injusticias que perturban el espíritu en soledad y conturban los espíritus en compañía, pueden asumirse y superarse (con «humilde» y «paciente» sabiduría).

 

La verdad confirmada entre personas primero, y la innovadora Libertad colectiva de todos después (ambas siempre «co-operativas» en ese orden), conjugadas conscientemente con inteligencia y uso de razón (natural, histórica y científica), han permitido y permiten, fomentándolos, tanto el progreso político-moral que la humanidad comprenda (por voluntaria devoción a la Verdad, la Libertad y la justicia de ellas derivada), como el progreso material que los humanos desean (por ambición natural de conocimiento veraz y de libertad material entendida como «contra-necesidad»; junto con la libertad de la ambición personal -allá cada cual que quiera entrar en ese necesario laberinto-).

 

Sólo esa racional conjunción entre Verdad y Libertad reconcilia el pasado con el futuro, intermediados por un presente que, comprometido con ambos, reduzca lo impredecible del porvenir; y está preparado para asumir y superar lo imprevisible que el porvenir nos depara; un porvenir que esa conjunción humaniza y tiende a perfeccionar. El Universo entero se convierte, entonces, en la mejor metáfora parabólica de nosotros mismos. Y se comprende, entonces, que los adjetivos del título del presente artículo (*) sean, en realidad, epítetos tautológicos.

 

[[Como decíamos en otros artículos («Psique-espíritu»; «III»; «XXXIX-2-»), cada persona es «de Verdad», salvo que un Poder ajeno, o su propio «estado mental», la confundan con otras o le impidan ser reconocida como tal. Sólo en el «Inter-esse», en el recíproco «Entre-Sí» voluntario, se confirman, si ellas quieren, esas verdades primordiales; que ya no serán meros «estados mentales». La Libertad colectiva y constituyente (que “nunca ha existido en la historia europea”(5), como ha escrito Trevijano), de sobrevenir, será «de milagro»: el «milagro» de cada voluntad de verdad extendida a todas las demás; el «milagro» de una armonía entre millones de verdades que quieran interpretar la inaudita sinfonía colectiva de la Libertad política. El «Inter-esse» es la razón, relación o inteligencia(a) entre dos o más verdades personales que «quieren ser» o, mejor, que quieren «estar siendo»; y se proponen, a voluntad y en Libertad, «seguir siendo» las verdades que, «Entre-Sí», verdaderamente «son». El «Entre-sí» confiado, fértil y triunfante nos libera de la tiranía del «sí-mismo» determinado, estéril y determinante.]](*)

 

 

 

 

(a) La palabra «inteligencia» deriva del vocablo latino «intelligentia», como cualidad del «intelligens/entis» (persona inteligente). «Intelligens/entis» es resultado de la composición del prefijo «inter» (entre); del participio activo del verbo «legere» (escoger, coger, leer,…); y los sufijos «-nt» que indica agente, e «-ia», que indica cualidad. «Legere» procede de la raíz indoeuropea «leg-», que significaba recoger, colectar (y derivados que significaban hablar). Puede «colegirse», por tanto, que para la «inteligencia» del «Inter-esse» toda verdad personal, cada persona, es «inter-essante», todas son escogidas y entrelazadas por ese puro «Entre-sí».

 

(*) El texto de este artículo (excepto los párrafos recogidos entre corchetes «[[..]]», que se añaden ahora, así como las citas de Arendt, Hegel y Trevijano), se corresponde, con ligeras variaciones y correcciones, con el publicado el 23 de junio de 2011, en la primera etapa del DiarioRC, bajo el título “Fe humana, verdad moral y libertad colectiva”.

 

(1) HEGEL, Georg Wilhelm Friedrich. “Introducción general y especial a las «Lecciones sobre la filosofía de la historia universal»”. Alianza Editorial, 2013. [escritas década 1820].

(2) SANTAYANA, George. “Escepticismo y fe animal” . Editorial Losada, S.A. 2002. [Ed. original 1923].

(3) LLINÁS, Rodolfo. “El cerebro y el mito del yo” . Editorial Norma, S.A. 2003. [Ed. original 2001].

(4) ARENDT, Hannah. “Entre el pasado y el futuro”.  Ediciones Península, S.A. 2003. [Ed. original: 1954].

(5) GARCÍA-TREVIJANO, Antonio. “Teoría pura de la República”. El Buey Mudo. 2010.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Carrito de compra
Traducir
Scroll al inicio

Política de privacidad

Queremos que leas y comprendas esta Política de Privacidad. Por eso, la hemos redactado en un lenguaje fácil y sencillo. No obstante, si quieres consultar las cuestiones más importantes, puedes dirigirte directamente al final y las verás especificadas de forma concisa en una tabla.

¿Quiénes somos y qué hacemos con tus datos?

En la asociación Movimiento de Ciudadanos hacia la República Constitucional (MCRC) (en adelante, “MCRC"), somos responsables del tratamiento de tus datos de carácter personal que llevaremos a cabo desde la página web del Diario Español de la República Constitucional (en adelante, el “Diario”): www.diariorc.com, la cual incluye la tienda de la editorial del MCRC (en adelante, la “Tienda”), cuyo dominio es de nuestra titularidad, según la información recogida en esta política de privacidad. Debes saber que somos una asociación cultural con domicilio social en Calle Alondra 1, Prado de Somosaguas, Pozuelo de Alarcón, 28223, Madrid, y nuestro NIF es G-86279259. Si tienes cualquier duda o consulta acerca de cómo tratamos tus datos, puedes escribirnos a [email protected] y estaremos encantados de atenderte. El acceso y/o uso al Diario te atribuye la condición de usuario (en adelante, “Usuario”), e implica la aceptación, desde dicho acceso y/o uso, de la presente Política de Privacidad para las finalidades indicadas en la misma así como el Aviso Legal, que también puedes consultar en el Diario.

¿Qué información recabamos sobre ti?

Recogemos los datos estrictamente necesarios para garantizar el correcto funcionamiento del boletín, la provisión de los servicios de venta ofrecidos en la Tienda, así como para asegurar que cumplimos con lo que nos piden los Usuarios, ya sea mediante la solicitud de información como el envío de compras realizadas a través del Diario. Recabamos información sobre ti cuando:
  • Nos solicitas información, ya sea vía email o a través de nuestro formulario web.
  • Te suscribes a nuestro boletín informativo, y/o solicites el envío las publicaciones por Whatsapp.
  • Nos remites obras para su publicación en el Diario.
  • Realizas una compra en la Tienda.
  • Dejas un comentario en la sección de comentarios de los contenidos del Diario.
Para que la información facilitada esté siempre actualizada y no contenga errores, recuerda comunicarnos las modificaciones que se vayan produciendo de tus datos de carácter personal a través de un correo electrónico a nuestra dirección. Además, cuando navegues por el Diario, podrán instalarse en tu dispositivo distintas cookies y otros dispositivos de seguimiento con el fin de asegurar un correcto funcionamiento de la página web, tal y como te explicamos en la Política de Cookies que puedes consultar en el Diario.

¿De dónde hemos obtenido tus datos?

Como puedes ver en el apartado anterior, los datos personales que necesitamos tratar en relación con el Diario, nos los aportas libremente a través de distintos canales. No obstante, en caso de que aportes datos personales de un tercero, garantizas que le has informado de esta Política de Privacidad y has obtenido su autorización para facilitarnos sus datos con las finalidades indicadas. Igualmente, te haces responsable de cualquier daño o perjuicio, directo o indirecto, que pudiera ocasionarse como consecuencia del incumplimiento de tal obligación. Como Usuario, garantizas que los datos que nos facilites -ya sean tuyos o de un tercero- serán veraces y exactos, debiéndonos comunicar cualquier modificación de los mismos. Nos reservamos el derecho a excluir del Diario a aquellos usuarios que hayan facilitado datos falsos, sin perjuicio de las demás acciones que procedan en Derecho.

¿Cómo funciona el boletín y la lista de difusión de Whatsapp?

El MCRC cuenta con un boletín informativo digital mediante el cual se comunica con sus asociados y suscriptores para mantenerles informados de las últimas publicaciones, novedades, acciones y participaciones. Suscribirte al boletín es muy sencillo, simplemente tienes que indicar tu correo electrónico en el apartado al efecto del Diario. Así mismo, el MCRC dispone de una lista de difusión de Whatsapp mediante la cual realiza avisos informativos con las publicaciones del boletín. Si quisieras recibir los avisos mediante la lista de difusión simplemente tendrás que aportar tu número de teléfono. Todos los datos que nos proporciones serán tratados de conformidad con esta Política de Privacidad.

¿Cómo usaremos tus datos y en base a qué?

Los datos de carácter personal recabados por el MCRC podrán ser utilizados para las siguientes finalidades: (i) Información. (ii) El envío del boletín informativo del MCRC mediante correo electrónico, y para enviarte mensajes informativos por Whatsapp en el caso de haberte suscrito. (iii) El envío de compras realizadas en la Tienda. (iv) La publicación de comentarios en el Diario. Desde el MCRC utilizaremos tus datos con las siguientes finalidades:
  1. Atender tus peticiones de información.
  2. Enviarte el boletín informativo en el case de haberte suscrito.
  3. Enviarte cualquier compra realizada en la Tienda a la dirección que nos proporciones.
  4. Generar facturas relacionadas con las compras realizadas en la Tienda.
  5. Atender cualquier solicitud de ejercicio de tus derechos que nos puedas hacer llegar, en cumplimiento de nuestras obligaciones legales.

¿Durante cuánto tiempo guardamos tus datos?

Sólo mantendremos tus datos durante el tiempo que sea estrictamente necesario para ofrecerte la información que requieras y poder realizar los envíos y realizar un seguimiento de los mismos, y posteriormente durante el periodo que resulte indispensable para poder cubrir eventuales responsabilidades o para la formulación, ejercicio o defensa de reclamaciones. No obstante lo anterior, podrás solicitar la eliminación de tus datos, y en caso de resultar aplicables dichos plazos legales de conservación, se mantendrán bloqueados durante el tiempo que la normativa establezca. En cuanto a nuestro boletín, conservaremos los datos proporcionados en tanto no manifiestes tu voluntad de darte de baja de los servicios.

¿Vamos a comunicar tus datos a terceros?

No cederemos tus datos a terceros excepto cuando se nos requiera por Ley, y en particular, podremos comunicar tus datos a las siguientes entidades, siempre en relación con las finalidades descritas:
  • A los órganos competentes de las Administraciones Públicas en cumplimiento de las obligaciones legales que nos sean de aplicación.
  • A nuestros proveedores de servicios auxiliares, necesarios para el normal funcionamiento de los servicios contratados, incluido el envío de las compras realizadas en el portal. En el caso de que algún proveedor se encuentre en una jurisdicción ajena al ámbito de aplicación del RGPD, te garantizamos que se encontrarán adheridos al Escudo de Privacidad (Privacy Shield) UE - EE. UU. Puedes aprender más haciendo click en este hipervínculo: https://www.aepd.es/sites/default/files/2019-09/guia-acerca-del-escudo-de-privacidad.pdf
    • A nuestros colaboradores, en el seno de prestaciones de servicios, los cuales estarán obligados a su vez a guardar la más estricta confidencialidad.

¿Cuáles son tus derechos y cómo puedes ejercitarlos?

  1. Derecho a acceder a tus datos personales para saber cuáles están siendo objeto de tratamiento y con qué
  2. Derecho a rectificar cualquier dato personal inexacto -por ejemplo, si necesitas actualizar la información o corregirla en caso de que fuera incorrecta-.
  3. Suprimir tus datos personales, cuando esto sea posible. Si la normativa vigente no nos permite eliminar tus datos, los bloquearemos durante el tiempo restante.
  4. Solicitar la limitación del tratamiento de tus datos personales cuando la exactitud, la legalidad o la necesidad del tratamiento de los datos resulte dudosa, en cuyo caso, podremos conservar los datos para el ejercicio o la defensa de reclamaciones.
  5. Oponerte al tratamiento de tus datos personales.
  6. Llevar a cabo la portabilidad de tus datos.
  7. Revocar el consentimiento otorgado -por ejemplo, si te suscribiste al boletín y ya no deseas recibir más información-.
  8. Ejercer tu derecho al olvido.
Podrás ejercitar tus derechos en cualquier momento y sin coste alguno, indicando qué derecho quieres ejercitar, tus datos y aportando copia de tu Documento de Identidad para que podamos identificarte, a través de las siguientes vías:
  1. Dirigiendo un correo electrónico a nuestra dirección: [email protected]
  2. Dirigiendo una solicitud escrita por correo ordinario a la dirección Calle Alondra 1, Prado de Somosaguas, Pozuelo de Alarcón, 28223, Madrid.
  3. Además, cuando recibas cualquier comunicación nuestra, clicando en la sección de baja que contendrá esa comunicación, podrás darte de baja de todos envíos de comunicaciones del MCRC previamente aceptados.
  4. Cuando te hayas suscrito a la recepción de mensajes informativos a través de Whatsapp podrás cancelar la suscripción desde el formulario del Diario donde te diste de alta, indicando que deseas darte de baja.
Si consideras que hemos cometido una infracción de la legislación en materia de protección de datos respecto al tratamiento de tus datos personales, consideras que el tratamiento no ha sido adecuado a la normativa o no has visto satisfecho el ejercicio de tus derechos, podrás presentar una reclamación ante la Agencia Española de Protección de Datos, sin perjuicio de cualquier otro recurso administrativo o acción judicial que proceda en su caso.

¿Están seguros tus datos?

La protección de tu privacidad es muy importante para nosotros. Por ello, para garantizarte la seguridad de tu información, hacemos nuestros mejores esfuerzos para impedir que se utilice de forma inadecuada, prevenir accesos no autorizados y/o la revelación no autorizada de datos personales. Asimismo, nos comprometemos a cumplir con el deber de secreto y confidencialidad respecto de los datos personales de acuerdo con la legislación aplicable, así como a conferirles un tratamiento seguro en las cesiones y transferencias internacionales de datos que, en su caso, puedan producirse.

¿Cómo actualizamos nuestra Política de Privacidad?

La Política de Privacidad vigente es la que aparece en el Diario en el momento en que accedas al mismo. Nos reservamos el derecho a revisarla en el momento que consideremos oportuno. No obstante, si hacemos cambios, estos serán identificables de forma clara y específica, conforme se permite en la relación que hemos establecido contigo (por ejemplo: te podemos comunicar los cambios por email).

Resumen de Información de nuestra Política de Privacidad.

Responsable del tratamiento MOVIMIENTO DE CIUDADANOS HACIA LA REPÚBLICA CONSTITUCIONAL (MCRC) Calle Alondra 1, Prado de Somosaguas, 28223, Pozuelo de Alarcón, Madrid. NIF: G-86279259
Finalidades de tratamiento de tus datos personales - Atender tus solicitudes de información, comentarios, peticiones y/o consultas en el marco de tu relación con el MCRC. - Atender las solicitudes para el ejercicio de tus derechos. - Enviarte todas las comunicaciones a las que te hubieras suscrito, incluido el boletín (si te hubieras suscrito) y comunicaciones por Whatsapp. - Enviar cualquier compra realizada en la Tienda del MCRC.
Origen de los datos tratados - Nos los has facilitado libremente tú mismo o un tercero en tu nombre. - Los hemos recabado a través de nuestro Sitio Web mediante cookies. Puedes obtener más información sobre este tratamiento en nuestra Política de Cookies.
Base de Legitimación para el tratamiento - El tratamiento es necesario para la ofrecerte la información necesaria en atención a tu condición de asociado del MCRC. - Para determinados tratamientos, nos has dado tu consentimiento expreso (ej participación en una acción; boletín…). - Contrato de compra entre las partes.
Cesión de datos a terceros - Cedemos tus datos a proveedores de servicios, incluidos aquellos relativos al envío de las compras realizadas en la Tienda. - En ningún caso se cederán tus datos a personas ajenas a la actividad del MCRC (ya sean asociados o ajenos a la asociación) y los servicios que nos has sido solicitado. - Cedemos tus datos a determinadas autoridades en cumplimiento de obligaciones legales (ej. Administraciones Públicas).
Plazos de conservación - Conservaremos tus datos durante el tiempo que siga vigente tu relación con el MCRC. - Si nos pides expresamente que los eliminemos, así lo haremos salvo que exista una obligación legal que nos lo impida o que, por ejemplo, necesitemos utilizarlos para la formulación, ejercicio y defensa de reclamaciones.
Derechos del interesado Podrás solicitarnos el ejercicio de tus derechos por correo electrónico: [email protected], o por escrito a nuestro domicilio social en Calle Alondra 1, Prado de Somosaguas, 28223, Pozuelo de Alarcón, Madrid. Puedes pedirnos el derecho a acceder a tus datos, a solicitar su rectificación o supresión, a limitar el tratamiento de tus datos, o a oponerte a determinados tratamientos, a retirar el consentimiento que nos hubieras prestado, a la portabilidad de tus datos o a no ser objeto de una decisión basada únicamente en el tratamiento automatizado. Si no estás de acuerdo con el tratamiento que realizamos de tus datos, puedes presentar una reclamación ante la Agencia Española de Protección de Datos: www.aepd.es. Si tienes alguna duda sobre esta Política de Privacidad o el tratamiento de tus datos, escríbenos a nuestra dirección de correo electrónico [email protected], y estaremos encantados de atenderte.

¡Hola! ¿Quieres recibir todas nuestras novedades al instante?
Envíanos tu número de teléfono y te añadiremos a nuestra lista de
difusión de Whatsapp.

     

    Whatsapp