Algo sobre la humildad

Hace ya más de medio siglo Otto Bollnow (1903-1991), uno de los tantos buenos filósofos alemanes[^1] que quedaron opacados por la sombra del Mago de Friburgo, sostuvo que hay una evolución de las virtudes según las distintas situaciones de la historia y que se adoptan unas y se posponen otras según el fondo de la concepción del hombre de cada época.

La humildad es una de esas virtudes que parecen desaparecer del universo del hombre de nuestros días en la medida en que se ha entronizado el individualismo y su secuela de egoísmo, subjetivismo, narcisismo y relativismo productos de la concepción liberal del hombre, el mundo y sus problemas.

El término humildad nace originariamente del término latino humus que significa tierra, luego deriva en humilis: de poca altura, para terminar en humilitas, que significa pegado a la tierra, que se arrastra o abajamiento.

La historia etimológica del término ya no da una idea distinta del concepto común de humildad, cuando se afirma que humilde es la persona modesta, sencilla, que no hace mal a nadie, que no reacciona nunca cuando la ofenden, en una palabra, que es “una mosca muerta”.

Por el contrario, su etimología nos dice que humilde es aquel que “tiene los pies en la tierra”, que sabe “quien es”, que no se cree más pero tampoco menos. En sentido estricto la humildad nos permite reconocer tanto las debilidades como las capacidades y obrar de acuerdo a ambas.

Sin embargo si profundizamos un poco más, vemos que la humildad es la virtud mondano-cristina por antonomasia, pues no se agota en el conocimiento de sí, sino que siempre reclama la existencia de un superior. Es por eso que de Dios no se puede decir que es humilde o que la humildad es una cualidad de Él, pues Dios no tiene nada superior a sí.

Este es el por qué la humildad es una virtud cristiana pero mundana. Virtud que para los filósofos griegos fue inconcebible, aún cuando hay algunos que vinculan la humildad erróneamente el principio socrático “sólo sé que no sé nada”, cuando lo que está mentando este principio es el problema del conocimiento, pero que en Sócrates tiene una derivación moral pues para él, el mal se realiza por ignorancia y en forma involuntaria.

Al ser una virtud eminentemente cristiana podemos entenderla por una disposición de servicio hacia todas las cosas, las buenas y las malas, las bellas y las feas, las vivas y las muertas desprendiéndonos de todo nuestro yo, de todo su posible valor. A diferencia del orgulloso para quien todo valor percibido es para él como un hurto para su propio valor, la humildad, en cambio, abre los ojos del hombre a todos los valores y disvalores del mundo.

El humilde verdadero puede realizar el más riesgoso de los actos psíquicos, dejar de lado su yo, porque camina en la vida bajo los ojos de Dios siempre. No es nada fácil este desprendimiento, pues una exégesis elemental del versículo Quien pierda su alma por causa de mí la salvará Mt.16:25. nos dice que, de alguna manera, el plenamente humilde no se plantea el tema de la identidad pues, ella misma, la pone en Dios.

Después de estas dos aproximaciones a la noción de humildad vemos que ella posee dos rasgos: abajamiento y sumisión.

Dentro del cuadro de las grandes virtudes cardinales que nos llegan desde Platón: prudencia, justicia, fortaleza y templanza; la humildad se vincula a ésta última como virtud de la medida, de la mesura. Porque la prudencia es la determinación por el sapiente (saber práctico) del bien en cada circunstancia. La justicia el establecimiento o restitución del bien, dándole a cada uno lo que le corresponde. La fortaleza la fuerza, que soporta y emprende, para buscarlo y mantenerlo. Y La temperancia la moderación, sensata y serena, para no perderlo.

El abajamiento, propiamente la humilitas, ha sido puesto de manifiesto en la magnífica definición que nos legó San Bernardo: la virtud por la que el hombre conociéndose como realmente es, se rebaja. Dice de sí y sobre lo que dicen de él: “no tiene importancia”.
En tanto que la sumisión está marcada en la definición que nos llega de Santo Tomás: consiste en mantenerse dentro de los propios límites sometiéndose a la autoridad superior. Y ese superior es, propiamente, Dios; a quien el humilde se somete de por vida. Y cuando se somete a los otros o a sus superiores lo hace por Dios.

Esta relación entre abajamiento y sumisión, entre rebajamiento y subordinación es el corazón de la dialéctica de la humildad: me rebajo porque subo y me someto porque me elevo. No soy nada a los ojos de Dios pues mi condición rastrera (humilitas) no me permite creerme más de lo que soy sino que tengo que rebajarme ante sus ojos y por Él ante los otros. Como vemos, esto es inconcebible en el mundo greco-pagano, que a lo que más que llegó, en este terreno, es a la idea de autoconocimiento con el gnothi seautón, el conócete a ti mismo.

Como toda virtud, entendida ésta como repetición de hábitos buenos, y siguiendo la teoría de Aristóteles del justo medio entre dos extremos opuestos, que en este tema resultó la más eficaz en todo el largo desarrollo de la filosofía por más de 2500 años, la humildad debe ser entendida como el término medio entre la soberbia y la autodenigración.
Hablando teológicamente siempre se ha opuesto la humildad de Cristo en la cruz que obedece al Padre: hágase en mi según tu palabra, a la soberbia de Lucifer, el portador de la luz, el más bello de los ángeles, que por ser tal se subleva contra Dios y se convierte en Satanás, el enemigo de Dios.

Así la soberbia es creerse más de lo que uno es y la autodenigración o auto abyección es considerarse mucho menos de lo que uno es. Hablando en criollo es echarse tierra encima. Pero como el término medio en el obrar humano no es un medio geométrico, apreciamos que la humildad, por la humilitas, está más cerca de la autodenigración que de la soberbia. Esto se ve en la expresión latina que se atribuye a San Anselmo hablando de la humildad: contemptibilem se esse cognoscere (reconocerse despreciable o conocerse a sí despreciativamente).

Dentro de la ascética cristiana se destaca en este tema: San Benito abad (480-547) con su famosísima Regula monachorum (Regla de los monjes).

Allí él distingue, en el capítulo VII hablando sobre la humildad, doce grados: 1) tener siempre presente el temor de Dios y acordarse de sus mandamientos. 2) no satisfacer su propia voluntad. 3) sujetarse por amor a Dios al superior. 4) paciencia ante las adversidades e injurias. 5) descubrir al superior por la confesión sus faltas ocultas. 6) vivir con contento por más que lo humillen o abatan. 7) decir y convencerse que es el último y más despreciable de todos. 8) nada haga sino lo que ordenen las leyes del monasterio. 9) reprimir la lengua hasta ser preguntado (no es posible hablar mucho sin pecar). 10) no ser propenso a reír (el necio en la risa levanta la voz). 11) hablar con suavidad y poco. 12) que el abajamiento se manifieste en todos cuantos lo vean.

Vemos como estos diversos grados se fundan en el sometimiento por el temor de Dios, pasa luego al sometimiento al superior y los otros y termina en el abajamiento de sí, “teniendo siempre inclinada la cabeza, clavados los ojos en tierra y juzgándose reo a todas horas por sus pecados”[^2]  

Tampoco debe confundirse con el servil, que en el fondo quiere dominar por sus servicios al señor, sino como dice el gran Scheler, “sin embargo la humildad es, en cambio, sobre todo una virtud de los señores natos”.[^3] 

Así, a través de esta la relación dialéctica entre sometimiento-abajamiento y abajamiento-sometimiento, hemos intentado mostrar la esencia de la humildad y como se puede llegar a ella mediante el esfuerzo humano, sólo falta una cosa la gracia de Dios, pero esto ya no es filosofía ni depende de nosotros.

Alberto Buela. Arkegueta, eterno comenzante, mejor que filósofo
[email protected]

Notas:

[^1]:Algunos de estos filósofos son: Pieper-1904; Gehlen-1904; Müller-1906; Fink-1905. Todos ellos se pueden leer con mucho provecho. 

[^2]:Benito, San: Regla de san Benito; Imprenta Aldecoa, Burgos, 1928, p. 46

[^3]:Schaler, Max: Rehabilitación de la virtud, p. 141

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Carrito de compra
Traducir
Scroll al inicio

Política de privacidad

Queremos que leas y comprendas esta Política de Privacidad. Por eso, la hemos redactado en un lenguaje fácil y sencillo. No obstante, si quieres consultar las cuestiones más importantes, puedes dirigirte directamente al final y las verás especificadas de forma concisa en una tabla.

¿Quiénes somos y qué hacemos con tus datos?

En la asociación Movimiento de Ciudadanos hacia la República Constitucional (MCRC) (en adelante, “MCRC"), somos responsables del tratamiento de tus datos de carácter personal que llevaremos a cabo desde la página web del Diario Español de la República Constitucional (en adelante, el “Diario”): www.diariorc.com, la cual incluye la tienda de la editorial del MCRC (en adelante, la “Tienda”), cuyo dominio es de nuestra titularidad, según la información recogida en esta política de privacidad. Debes saber que somos una asociación cultural con domicilio social en Calle Alondra 1, Prado de Somosaguas, Pozuelo de Alarcón, 28223, Madrid, y nuestro NIF es G-86279259. Si tienes cualquier duda o consulta acerca de cómo tratamos tus datos, puedes escribirnos a [email protected] y estaremos encantados de atenderte. El acceso y/o uso al Diario te atribuye la condición de usuario (en adelante, “Usuario”), e implica la aceptación, desde dicho acceso y/o uso, de la presente Política de Privacidad para las finalidades indicadas en la misma así como el Aviso Legal, que también puedes consultar en el Diario.

¿Qué información recabamos sobre ti?

Recogemos los datos estrictamente necesarios para garantizar el correcto funcionamiento del boletín, la provisión de los servicios de venta ofrecidos en la Tienda, así como para asegurar que cumplimos con lo que nos piden los Usuarios, ya sea mediante la solicitud de información como el envío de compras realizadas a través del Diario. Recabamos información sobre ti cuando:
  • Nos solicitas información, ya sea vía email o a través de nuestro formulario web.
  • Te suscribes a nuestro boletín informativo, y/o solicites el envío las publicaciones por Whatsapp.
  • Nos remites obras para su publicación en el Diario.
  • Realizas una compra en la Tienda.
  • Dejas un comentario en la sección de comentarios de los contenidos del Diario.
Para que la información facilitada esté siempre actualizada y no contenga errores, recuerda comunicarnos las modificaciones que se vayan produciendo de tus datos de carácter personal a través de un correo electrónico a nuestra dirección. Además, cuando navegues por el Diario, podrán instalarse en tu dispositivo distintas cookies y otros dispositivos de seguimiento con el fin de asegurar un correcto funcionamiento de la página web, tal y como te explicamos en la Política de Cookies que puedes consultar en el Diario.

¿De dónde hemos obtenido tus datos?

Como puedes ver en el apartado anterior, los datos personales que necesitamos tratar en relación con el Diario, nos los aportas libremente a través de distintos canales. No obstante, en caso de que aportes datos personales de un tercero, garantizas que le has informado de esta Política de Privacidad y has obtenido su autorización para facilitarnos sus datos con las finalidades indicadas. Igualmente, te haces responsable de cualquier daño o perjuicio, directo o indirecto, que pudiera ocasionarse como consecuencia del incumplimiento de tal obligación. Como Usuario, garantizas que los datos que nos facilites -ya sean tuyos o de un tercero- serán veraces y exactos, debiéndonos comunicar cualquier modificación de los mismos. Nos reservamos el derecho a excluir del Diario a aquellos usuarios que hayan facilitado datos falsos, sin perjuicio de las demás acciones que procedan en Derecho.

¿Cómo funciona el boletín y la lista de difusión de Whatsapp?

El MCRC cuenta con un boletín informativo digital mediante el cual se comunica con sus asociados y suscriptores para mantenerles informados de las últimas publicaciones, novedades, acciones y participaciones. Suscribirte al boletín es muy sencillo, simplemente tienes que indicar tu correo electrónico en el apartado al efecto del Diario. Así mismo, el MCRC dispone de una lista de difusión de Whatsapp mediante la cual realiza avisos informativos con las publicaciones del boletín. Si quisieras recibir los avisos mediante la lista de difusión simplemente tendrás que aportar tu número de teléfono. Todos los datos que nos proporciones serán tratados de conformidad con esta Política de Privacidad.

¿Cómo usaremos tus datos y en base a qué?

Los datos de carácter personal recabados por el MCRC podrán ser utilizados para las siguientes finalidades: (i) Información. (ii) El envío del boletín informativo del MCRC mediante correo electrónico, y para enviarte mensajes informativos por Whatsapp en el caso de haberte suscrito. (iii) El envío de compras realizadas en la Tienda. (iv) La publicación de comentarios en el Diario. Desde el MCRC utilizaremos tus datos con las siguientes finalidades:
  1. Atender tus peticiones de información.
  2. Enviarte el boletín informativo en el case de haberte suscrito.
  3. Enviarte cualquier compra realizada en la Tienda a la dirección que nos proporciones.
  4. Generar facturas relacionadas con las compras realizadas en la Tienda.
  5. Atender cualquier solicitud de ejercicio de tus derechos que nos puedas hacer llegar, en cumplimiento de nuestras obligaciones legales.

¿Durante cuánto tiempo guardamos tus datos?

Sólo mantendremos tus datos durante el tiempo que sea estrictamente necesario para ofrecerte la información que requieras y poder realizar los envíos y realizar un seguimiento de los mismos, y posteriormente durante el periodo que resulte indispensable para poder cubrir eventuales responsabilidades o para la formulación, ejercicio o defensa de reclamaciones. No obstante lo anterior, podrás solicitar la eliminación de tus datos, y en caso de resultar aplicables dichos plazos legales de conservación, se mantendrán bloqueados durante el tiempo que la normativa establezca. En cuanto a nuestro boletín, conservaremos los datos proporcionados en tanto no manifiestes tu voluntad de darte de baja de los servicios.

¿Vamos a comunicar tus datos a terceros?

No cederemos tus datos a terceros excepto cuando se nos requiera por Ley, y en particular, podremos comunicar tus datos a las siguientes entidades, siempre en relación con las finalidades descritas:
  • A los órganos competentes de las Administraciones Públicas en cumplimiento de las obligaciones legales que nos sean de aplicación.
  • A nuestros proveedores de servicios auxiliares, necesarios para el normal funcionamiento de los servicios contratados, incluido el envío de las compras realizadas en el portal. En el caso de que algún proveedor se encuentre en una jurisdicción ajena al ámbito de aplicación del RGPD, te garantizamos que se encontrarán adheridos al Escudo de Privacidad (Privacy Shield) UE - EE. UU. Puedes aprender más haciendo click en este hipervínculo: https://www.aepd.es/sites/default/files/2019-09/guia-acerca-del-escudo-de-privacidad.pdf
    • A nuestros colaboradores, en el seno de prestaciones de servicios, los cuales estarán obligados a su vez a guardar la más estricta confidencialidad.

¿Cuáles son tus derechos y cómo puedes ejercitarlos?

  1. Derecho a acceder a tus datos personales para saber cuáles están siendo objeto de tratamiento y con qué
  2. Derecho a rectificar cualquier dato personal inexacto -por ejemplo, si necesitas actualizar la información o corregirla en caso de que fuera incorrecta-.
  3. Suprimir tus datos personales, cuando esto sea posible. Si la normativa vigente no nos permite eliminar tus datos, los bloquearemos durante el tiempo restante.
  4. Solicitar la limitación del tratamiento de tus datos personales cuando la exactitud, la legalidad o la necesidad del tratamiento de los datos resulte dudosa, en cuyo caso, podremos conservar los datos para el ejercicio o la defensa de reclamaciones.
  5. Oponerte al tratamiento de tus datos personales.
  6. Llevar a cabo la portabilidad de tus datos.
  7. Revocar el consentimiento otorgado -por ejemplo, si te suscribiste al boletín y ya no deseas recibir más información-.
  8. Ejercer tu derecho al olvido.
Podrás ejercitar tus derechos en cualquier momento y sin coste alguno, indicando qué derecho quieres ejercitar, tus datos y aportando copia de tu Documento de Identidad para que podamos identificarte, a través de las siguientes vías:
  1. Dirigiendo un correo electrónico a nuestra dirección: [email protected]
  2. Dirigiendo una solicitud escrita por correo ordinario a la dirección Calle Alondra 1, Prado de Somosaguas, Pozuelo de Alarcón, 28223, Madrid.
  3. Además, cuando recibas cualquier comunicación nuestra, clicando en la sección de baja que contendrá esa comunicación, podrás darte de baja de todos envíos de comunicaciones del MCRC previamente aceptados.
  4. Cuando te hayas suscrito a la recepción de mensajes informativos a través de Whatsapp podrás cancelar la suscripción desde el formulario del Diario donde te diste de alta, indicando que deseas darte de baja.
Si consideras que hemos cometido una infracción de la legislación en materia de protección de datos respecto al tratamiento de tus datos personales, consideras que el tratamiento no ha sido adecuado a la normativa o no has visto satisfecho el ejercicio de tus derechos, podrás presentar una reclamación ante la Agencia Española de Protección de Datos, sin perjuicio de cualquier otro recurso administrativo o acción judicial que proceda en su caso.

¿Están seguros tus datos?

La protección de tu privacidad es muy importante para nosotros. Por ello, para garantizarte la seguridad de tu información, hacemos nuestros mejores esfuerzos para impedir que se utilice de forma inadecuada, prevenir accesos no autorizados y/o la revelación no autorizada de datos personales. Asimismo, nos comprometemos a cumplir con el deber de secreto y confidencialidad respecto de los datos personales de acuerdo con la legislación aplicable, así como a conferirles un tratamiento seguro en las cesiones y transferencias internacionales de datos que, en su caso, puedan producirse.

¿Cómo actualizamos nuestra Política de Privacidad?

La Política de Privacidad vigente es la que aparece en el Diario en el momento en que accedas al mismo. Nos reservamos el derecho a revisarla en el momento que consideremos oportuno. No obstante, si hacemos cambios, estos serán identificables de forma clara y específica, conforme se permite en la relación que hemos establecido contigo (por ejemplo: te podemos comunicar los cambios por email).

Resumen de Información de nuestra Política de Privacidad.

Responsable del tratamiento MOVIMIENTO DE CIUDADANOS HACIA LA REPÚBLICA CONSTITUCIONAL (MCRC) Calle Alondra 1, Prado de Somosaguas, 28223, Pozuelo de Alarcón, Madrid. NIF: G-86279259
Finalidades de tratamiento de tus datos personales - Atender tus solicitudes de información, comentarios, peticiones y/o consultas en el marco de tu relación con el MCRC. - Atender las solicitudes para el ejercicio de tus derechos. - Enviarte todas las comunicaciones a las que te hubieras suscrito, incluido el boletín (si te hubieras suscrito) y comunicaciones por Whatsapp. - Enviar cualquier compra realizada en la Tienda del MCRC.
Origen de los datos tratados - Nos los has facilitado libremente tú mismo o un tercero en tu nombre. - Los hemos recabado a través de nuestro Sitio Web mediante cookies. Puedes obtener más información sobre este tratamiento en nuestra Política de Cookies.
Base de Legitimación para el tratamiento - El tratamiento es necesario para la ofrecerte la información necesaria en atención a tu condición de asociado del MCRC. - Para determinados tratamientos, nos has dado tu consentimiento expreso (ej participación en una acción; boletín…). - Contrato de compra entre las partes.
Cesión de datos a terceros - Cedemos tus datos a proveedores de servicios, incluidos aquellos relativos al envío de las compras realizadas en la Tienda. - En ningún caso se cederán tus datos a personas ajenas a la actividad del MCRC (ya sean asociados o ajenos a la asociación) y los servicios que nos has sido solicitado. - Cedemos tus datos a determinadas autoridades en cumplimiento de obligaciones legales (ej. Administraciones Públicas).
Plazos de conservación - Conservaremos tus datos durante el tiempo que siga vigente tu relación con el MCRC. - Si nos pides expresamente que los eliminemos, así lo haremos salvo que exista una obligación legal que nos lo impida o que, por ejemplo, necesitemos utilizarlos para la formulación, ejercicio y defensa de reclamaciones.
Derechos del interesado Podrás solicitarnos el ejercicio de tus derechos por correo electrónico: [email protected], o por escrito a nuestro domicilio social en Calle Alondra 1, Prado de Somosaguas, 28223, Pozuelo de Alarcón, Madrid. Puedes pedirnos el derecho a acceder a tus datos, a solicitar su rectificación o supresión, a limitar el tratamiento de tus datos, o a oponerte a determinados tratamientos, a retirar el consentimiento que nos hubieras prestado, a la portabilidad de tus datos o a no ser objeto de una decisión basada únicamente en el tratamiento automatizado. Si no estás de acuerdo con el tratamiento que realizamos de tus datos, puedes presentar una reclamación ante la Agencia Española de Protección de Datos: www.aepd.es. Si tienes alguna duda sobre esta Política de Privacidad o el tratamiento de tus datos, escríbenos a nuestra dirección de correo electrónico [email protected], y estaremos encantados de atenderte.

¡Hola! ¿Quieres recibir todas nuestras novedades al instante?
Envíanos tu número de teléfono y te añadiremos a nuestra lista de
difusión de Whatsapp.

     

    Whatsapp